El deporte de iniciación tiene por objetivo el disfrutar haciendo deporte al mismo tiempo que desarrolla cualidades físicas, aprenden valores y los conocimientos técnico-tácticos de dicho deporte. En esta etapa es muy importante la relación triangular entre padres, entrenadores y los jóvenes deportistas, centrando el trabajo psicológico en los dos primeros. Los niños son pura emoción por lo que no comprenden el espíritu competitivo, solamente juegan, disfrutan y aprenden.
TECNIFICACIÓN
La tecnificación deportiva es la etapa en la que se produce una especialización técnica de los deportistas. Comprendida desde el final de la etapa de iniciación hasta su consolidación como deportistas de alto nivel. Es muy importante el trabajo psicológico durante la tecnificación deportiva, ya que es el momento en el que debemos enseñar a estos jóvenes deportistas a competir, ayudándoles a potenciar sus capacidades y dotar de herramientas para poder gestionar sus primeras competiciones.
ALTO RENDIMIENTO
El objetivo principal es mejorar el rendimiento del deportista de élite tanto en la competición como en el entrenamiento. Al igual que trabajamos las variables del rendimiento físicas, tácticas y técnicas, ¿porque no las psicológicas?.
El deporte de Alto Rendimiento requiere establecer un equilibrio perfecto entre el dominio corporal, mental y emocional, trabajando aspectos que influyen en nuestro rendimiento (autoconfianza, motivación, control emocional, etc.) y los efectos psicológicos derivados de la práctica deportiva (autoestima, estrés, ansiedad, etc.).
Potenciaremos al máximo nuestras capacidades para poder potenciar al máximo nuestro rendimiento.
LESIONES
¿A que se deben algunas de nuestras lesiones?, ¿porque se producen en algunos momentos de la temporada y no en otros?, ¿puedo prevenir de alguna forma las lesiones?
Estas son algunas de las preguntas que pasan por la cabeza de los deportistas. La aparición de una lesión o el simple miedo de poder sufrir alguna, es un factor con un elevado impacto emocional que afecta directamente sobre nuestro rendimiento. Un estado emocional estable ayuda ante la prevención de la lesión y puede favorecer su recuperación.